Estudio revela que tener mascotas reduce el riesgo de alergias alimentarias en niños
Vivir con perros o gatos puede ser beneficioso para los menores, ya que presentan menos posibilidades de ser alérgicos a alimentos comunes como el huevo o nueces.
Un reciente estudio realizado por científicos del Centro Regional de Fukushima para el Estudio del Medio Ambiente y los Niños de Japón revela que los niños que crecen junto a una mascota pueden tener menos probabilidades de desarrollar alergias alimentarias. Esta conclusión se basa en el análisis de cerca de 65 000 niños.
En un principio se realizó una observación detallada a niños en desarrollo fetal hasta la primera infancia, y se encontró que aquello que compartían su hogar con una mascota tenían menos probabilidades de presentar síntomas de alergias alimentarias.
Para entonces, los científicos realizaron diversos análisis considerando todas las posibilidades, como la presencia de alergias previas en los niños y si vivían con mascotas. Se examinó a los niños incluso antes de nacer, durante el primer trimestre del embarazo, en el momento del parto y durante el chequeo a los treinta días. Se encontró que alrededor del 22% de los niños habían estado expuestos a mascotas durante el periodo fetal, y estos presentaban una menor tendencia a desarrollar alergias.
Por lo que, los niños que estuvieran expuestos a perros mostrarían una menor probabilidad de desarrollar alergias a alimentos como el huevo, la leche y las nueces. En el caso de aquellos que convivieran con gatos tendrían menos probabilidades de ser alérgicos al huevo, trigo y soya.
Finalmente, aunque todavía no se ha identificado la razón exacta de esta relación, los investigadores esperan que estos análisis brinden mayor información a los médicos para abordar y analizar con mayor detalle el origen de las alergias.