¿Qué pasará con Yoon Suk-yeol tras la orden de detención?

La tensión en torno a la situación del expresidente surcoreano Yoon Suk-yeol aumentó este miércoles en Seúl, tras la posibilidad de que las autoridades ejecutaran la orden de detención emitida para interrogarlo sobre su intento fallido de imponer la ley marcial. La orden fue otorgada por un tribunal del Distrito Oeste de Seúl, después de que Yoon desobedeciera tres citaciones para declarar sobre su proclamación de excepción en diciembre pasado.

Desde hace días, cientos de seguidores del exmandatario se concentran frente a su residencia en el barrio de Hannam, ondeando banderas surcoreanas y estadounidenses, mientras claman contra la detención y emiten mensajes de apoyo a Yoon. Algunos de estos seguidores, enardecidos por las declaraciones del expresidente, han utilizado lemas similares a los de los grupos radicales que apoyaron a Donald Trump, como “¡Paren el robo!” en relación a las elecciones de 2022 en Corea del Sur, que consideran fraudulentas.

La situación se complicó aún más cuando los partidarios de Yoon, en un intento por impedir su arresto, bloquearon el acceso de la policía a la residencia del exmandatario. La policía tuvo que dispersar a varios manifestantes, algunos de los cuales se tumbaron en el suelo para obstaculizar el paso. Yoon, por su parte, ha asegurado que luchará junto a sus seguidores "hasta el final", tras advertir que el país está bajo amenaza de fuerzas internas y externas que buscan desestabilizarlo.

Los abogados de Yoon han solicitado que se anule la orden de detención, alegando que solo la Fiscalía puede solicitar este tipo de arrestos. Además, han advertido que los agentes de policía podrían ser arrestados si intentan aprehender al expresidente, quien es el primero en la historia de Corea del Sur en enfrentarse a una posible detención mientras sigue en el cargo, aunque suspendido.

La situación política en el país sigue siendo incierta. Aunque el Parlamento destituyó a Yoon el 14 de diciembre, se espera que el Tribunal Constitucional decida si lo restituyen o lo cesan de manera definitiva en los próximos meses. Mientras tanto, el expresidente sigue defendiendo su postura, mientras sus seguidores se preparan para resistir cualquier intento de detención.