Madrid aprueba Ley de Bienestar Animal que trae nuevas responsabilidades
Madrid da un paso hacia el bienestar animal con leyes que regulan la alimentación, protegen contra el abandono y exigen formación para dueños de perros.
La recién promulgada Ley de Bienestar Animal en Madrid introduce cambios significativos que requieren la atención de los dueños de mascotas.
En particular, la alimentación de los animales se ve afectada, prohibiendo el uso de vísceras, cadáveres y despojos no sometidos a estrictos controles sanitarios como alimento para mascotas. Además, la legislación exige que los propietarios se comprometan a proporcionar una dieta adecuada que no ponga en peligro la salud de sus animales de compañía.
No obstante, la ley no se limita al ámbito alimentario. Los dueños de animales están obligados a cumplir con diversas medidas, que incluyen el sacrificio y la eutanasia supervisados por veterinarios para animales abandonados, la prohibición del abandono, venta o compra de animales, y la supervisión constante de las mascotas para evitar el abandono por más de 24 horas. El incumplimiento de estas normas puede conllevar sanciones, incluso penas de cárcel, según lo establecido en el Boletín Oficial del Estado.
En un giro positivo, la nueva normativa garantiza un acceso sin restricciones a los animales de compañía en diversos lugares públicos y privados, desde medios de transporte hasta establecimientos comerciales, restaurantes y bares.
Sin embargo, una de las novedades más destacadas es la obligatoriedad de realizar un curso de formación para los propietarios de perros, con una validez indefinida. Además, se espera la aprobación de un reglamento que impondrá la necesidad de mantener un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros durante toda la vida del animal.
La Ley de Bienestar Animal en Madrid establece un marco integral que busca no solo mejorar la calidad de vida de los animales de compañía, sino también responsabilizar a los propietarios de su cuidado y bienestar. Madrid da un paso importante y pone el ejemplo a muchos otros países en la tenencia responsable de mascotas.