Prohibiciones de bolsas de plástico dan efectos positivos en EE. UU.

Las bolsas de plástico de un solo uso han sido señaladas como una amenaza ambiental persistente. Sin embargo, un reciente estudio arroja luz sobre el impacto positivo de las prohibiciones implementadas en cinco estados y ciudades de EE.UU., donde se ha observado una drástica reducción en el consumo y la contaminación asociada con estas bolsas.

Estas prohibiciones, aplicadas en lugares como Nueva Jersey, Vermont, Filadelfia, Portland y Santa Bárbara, han logrado disminuir el consumo de bolsas de plástico de un solo uso en aproximadamente 6000 millones de unidades al año. Con una población combinada de cerca de 12 millones de personas, estas medidas han evitado el uso de tantas bolsas que, si se extendieran a nivel nacional, podrían eliminar unas 300 bolsas per cápita anuales, según el informe.

La adopción de políticas similares en otras regiones podría tener un efecto multiplicador, incentivando a los consumidores a optar por opciones más sostenibles, como bolsas reutilizables o llevar los productos en la mano.

No obstante, el informe sugiere que los responsables políticos deben evitar lagunas jurídicas y prohibir enérgicamente las bolsas de plástico de un solo uso. Se aboga por tarifas adecuadas para las bolsas de papel y la distribución de bolsas auténticamente reutilizables como medidas esenciales para garantizar el éxito de estas políticas.

La lucha contra la contaminación por plásticos requiere medidas audaces y coordinadas. Las prohibiciones de bolsas de plástico, como evidencia el estudio, no solo reducen la contaminación y la basura, sino que también fomentan comportamientos más sostenibles entre los consumidores. Al adoptar estas políticas a nivel global y perfeccionar su implementación, podemos avanzar significativamente hacia un entorno más limpio y saludable.