San Valentín: consejos para tener buenas finanzas en pareja

Febrero, conocido por celebrar el amor y la amistad, nos brinda la oportunidad perfecta para reflexionar sobre la importancia de las relaciones en nuestra vida, y qué mejor momento para cuestionarnos cómo llevamos nuestras finanzas en pareja.

La gestión del dinero de manera individual es un reflejo de quiénes somos y por si sólo puede ser complejo. Si a esto le sumas los intereses e ideales de tu pareja, se vuelve todo un desafío, pero con la comunicación abierta y la colaboración de cada uno en proporción de sus ingresos, es posible alcanzar metas financieras compartidas, fortalecer la relación y cumplir sueños.

A continuación, algunas recomendaciones para construir solidez financiera en pareja:

1.    Comunicación transparente: la base de una relación en pareja es la comunicación, más aún en el tema financiero. Sincerarse sobre las metas, ingresos, deudas y hábitos de gasto, es crucial. Diseñar juntos el presupuesto, sobre todo cuando se comparte una casa y discutir los objetivos financieros de cada uno, asegura que ambos estén en la misma página y tengan plena conciencia de cuánto se gasta y cuánto aporta cada uno.

2.    Establecer metas comunes: definir metas financieras juntos, crea un sentido compartido de propósito. Pueden ser metas a corto plazo, como un viaje, crear un fondo de ahorro conjunto o de largo plazo, como comprar una casa. Al trabajar en equipo para alcanzar estas metas, se fortalece la conexión emocional y se fomenta la responsabilidad con el otro.

3.    Crear un presupuesto: elaborar un presupuesto real que refleje las necesidades de ambos es esencial. Asignar responsabilidades financieras, determinar el porcentaje de participación de cada uno, desde sus posibilidades y comprometerse a cumplir con lo establecido ayuda a evitar malentendidos y conflictos innecesarios. También es importante evaluar en qué se gasta más (comidas fuera de casa, plataformas de streaming, plataformas de transporte), y cómo se pueden reajustar esos gastos para sumar a su meta común.

4.    Ahorrar juntos: fomentar el hábito del ahorro en pareja es fundamental. Establecer un fondo de emergencias compartido puede representar la diferencia ante un imprevisto, para no recurrir a deudas innecesarias. Contemplar el ahorro como parte del presupuesto de pareja es de suma importancia, o en caso de solicitar préstamos que sea en plataformas confiables.

5.     Planificación financiera a largo plazo: invertir tiempo en la planificación financiera es una muestra de compromiso. Considerar aspectos como seguros de vida, testamentos y estrategias de inversión en conjunto, puede brindar tranquilidad y protección a la pareja en el futuro. Cada relación está basada en acuerdos y es muy común que los ingresos no sean iguales entre la pareja. Sin embargo, esto no quiere decir que, a medida de sus posibilidades, cada uno no pueda destinar un porcentaje al ahorro o a ese sueño que tanto anhelan.

En este mes reflexionemos sobre cómo podemos fortalecer nuestras relaciones, incluyendo la relación financiera. Hacer equipo con tu pareja en el ámbito financiero debe dejar de ser un tabú y nos ayuda a construir un futuro financiero sólido y armonioso.